viernes, 27 de noviembre de 2020

Los analfabetos de hoy son los peores

Los analfabetos de ahora son los peores, te los encuentras a la vuelta de cualquier esquina. Antes, cuando no se tenía acceso a la educación se podía decir que estaba justificado, los de ahora no tienen justificante aparente.

A los analfabetos de ahora, las televisiones le ponen una parrilla a su medida, para mantenerlos lobotomizados, presos de gurúes sin escrúpulos, regurgitan sapos los cuales son engullidos por estos analfabetos sin analizar absolutamente una sola palabra.

A los analfabetos de ahora, se les ha confeccionado una casta política a su medida. Políticos sin preparación, sin escrúpulos, sin capacidad para resolver la mínima cuestión que le pueda competer. Tan analfabetos cómo esos mismos que los defienden con su voto desde la misma cola del paro, o aun peor, haciendo cola para que le den un suministro de beneficencia.

Estamos llegando a cotas inimaginables de ignorancia. No tardando mucho, nuestro intelecto podrá ser medido al de cualquier primate.

y cómo dice el gran Quintero: "Estamos los que aspiramos a un poco más de profundidad, un poquito mas, un poquito más"...


  fuente

domingo, 1 de noviembre de 2020

UN ÁNGEL ESTÁ EN EL CIELO


Precisamente hoy, este día tan señalado has decidido partir. Te vas al cielo, con todos los santos, Ellos te acogerán, y serás una de ellos. Ve sin miedo, has trascendido hacia una dimensión donde encontrarás las respuestas que no hubo en este plano que acabas de abandonar. 

No te sientas sola, este viaje lo haces acompañada por todos los que te hemos querido y te querremos siempre. Estás en el corazón de toda tu familia para que te sea leve el cambio. Sabrás reconocer el camino, y verás hacia donde tienes que dirigirte. Partes hacia un lugar donde el dolor  y la enfermedad no tienen cabida. 

A quienes quedamos en este plano, el dolor será fuerte durante mucho tiempo. Martita y Raquel, se que no te van a olvidar nunca al igual que yo. Quiero que sepas que los tres te vamos a querer durante toda nuestra vida. 
Pero no solo quería contarte esto en esta carta. Quería agradecerte el valor con el que has luchado, los valores tan grandes que dejas, tu coraje afrontando pruebas, las cuales cada vez se tornaron más difíciles de acometer. No quiero olvidarme de mencionar a tus padres y hermano, de su dolor en estos momentos tan duros y difíciles de entender. El ser humano no está preparado para semejantes despedidas tan dolorosas. Nosotros estaremos al lado de ellos cuando nos necesiten, cuando sea preciso nuestro aliento y animo. 

Yo sé que no es una despedida, es un hasta pronto, para ti seguramente el tiempo no será medido del mismo modo a cómo nosotros lo percibiremos. El tiempo tendrá que curar primeramente las heridas la propia existencia. 

Deberías de haber permanecido más tiempo entre nosotros, habernos dejado disfrutar de tu presencia por muchos años, es más, a tu edad no se concibe una marcha tan prematura. Pero quienes somos nosotros para decir cuando es el momento de la partida. El tuyo estaba escrito y así ha sido. 

Iré a despedirme de tu presencia física, la que quedas en este mundo, y a guardar en mi corazón el cariño y amor de tu ser. Esta misiva la leerás desde el cielo, sabiendo lo mucho que se te va a querer siempre.

Hasta pronto Rosita